Perspectivas
Kelly Wearstler: una gran proeza global de una marca de estilo de vida
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Kelly Wearstler habla sobre diseño, inspiración y cómo creó su marca desde cero.
“Mi estética es una yuxtaposición de muchas pasiones y amores diferentes”, dice Kelly Wearstler, fundadora y CEO de su marca de estilo de vida homónima. “Arquitectura, arte, moda, diseño gráfico, diseño de paisajes, naturaleza... todo puede ser fuente de inspiración, desde un hermoso azulejo en una calle de Lisboa hasta un botón decorativo en una chaqueta vintage... Tomar riesgos es el lujo supremo”.
Su principal tienda en la icónica Melrose Avenue de Los Angeles, que vende una combinación de piezas decorativas para el hogar de estilo moderno y vintage, desde muebles hasta accesorios para el hogar, definitivamente lleva esa yuxtaposición directamente al corazón. La fachada redondeada y gris oscura del edificio no es lo que uno esperaría de una diseñadora conocida por sus interiores y diseños eclécticos y audaces. Sin embargo, una vez que se atraviesa la imponente entrada, es como entrar a un mundo totalmente diferente, en el que las culturas, las épocas, los interiores, los exteriores, todo se combina en el peculiar mundo de Kelly Wearstler.
Sin lugar a dudas, Wearstler es una figura galardonada y multifacética a tener en cuenta. Además de ser la autora de cuatro libros ilustrados, también tiene entre sus clientes a celebridades y creadores de tendencias de todo el mundo. También es responsable del estilo de propiedades comerciales notorias, como el restaurante Viviane de Beverly Hills y el Four Seasons Resort de Anguilla. Si bien su negocio ya cuenta con una presencia global importante (los productos de Kelly Wearstler se venden en más de 20 países), ella tiene la mirada puesta en expandirse aún más en Asia. “Tenemos una presencia importante en Europa y Rusia”, dice Wearstler. “En estos momentos, también estoy considerando varios proyectos de diseño en Hong Kong y Macao”.
Se sentó a conversar con nosotros acerca de cómo encuentra inspiración para todos sus proyectos, cómo construyó su negocio. Además, compartió algunas lecciones importantes que aprendió en el camino.
"Me considero a mí misma una diseñadora de interiores, una ampliadora de ideas, una creadora de experiencias."
Empezó con una firma de diseño de interiores, pero la convirtió en una marca de estilo de vida. ¿Cómo fue la transición de su negocio del diseño de interiores al diseño de accesorios para el hogar y muebles?
Bergdorf Goodman se puso en contacto conmigo para diseñar una línea de accesorios para el hogar en 2006. Todo empezó siendo un poco restringido y acotado. Con el transcurso del tiempo, la marca creció de manera ordenada a partir de la colección de los accesorios para el hogar para incluir muebles, tapetes, luminarias y varias asociaciones y colaboraciones con algunas de las marcas globales más respetadas en el mercado de lujo. El diseño de interior ha impulsado todo el diseño de nuestros productos. Hay una polinización cruzada inherente: la arquitectura y los interiores influyen nuestras piezas de arte, la decoración del hogar, la luminaria, los muebles y viceversa. Incorporo materiales naturales y orgánicos en todos mis espacios y diseños.
Mi estudio de diseño incluye muchas disciplinas diferentes bajo un mismo techo y las diferentes técnicas alimentan la una a la otra. La curiosidad y la pasión inspiran continuamente la expansión del alcance de mi marca. Abordo cada proyecto, ya sea un hotel, un mueble o un a colección de tejidos, con el mismo proceso de investigación. Todos estos puntos de contacto tienen un lugar especial en mi corazón, ya que juegan un papel importante en la evolución de mi argumento de diseño. He sido afortunada por haber trabajado con clientes increíbles a lo largo de mi carrera y los considero mi mayor inspiración. Cuando los proyectos se articulan exitosamente, ocurre una progresión natural que da lugar al crecimiento.
¿Cuáles fueron algunos de los desafíos más grandes que tuvo al expandir su negocio más allá del diseño de interiores? ¿Qué lecciones aprendió de ellos?
Uno de los aprendizajes clave fue adaptarme a la diferencia entre el negocio del diseño de interiores, que está dirigido a necesidades específicas de los clientes y a proyectos altamente planificados, y el negocio de la marca de estilo de vida, diseñar, producir y vender muebles, tapetes, luminarias, artículos de decoración para el hogar, que está impulsado por un mercado mucho más extenso y que consume una audiencia más amplia. La administración del tiempo también necesita perfeccionarse, ya que mi tiempo se divide en más áreas de enfoque y en diversas fechas de entrega. Aprendí que encontrar y rodearte de las personas correctas y talentosas es la única manera de hacerse camino entre los diversos tipos de productos y la evolución del negocio.
"La curiosidad y la pasión inspiran continuamente la expansión del alcance de mi marca."
Soy una apasionada de las listas. Todos los fines de semana, hago una lista de las metas que quiero cumplir en la semana siguiente y giro en torno a ella, de ser necesario. Tengo un equipo de gestión sólido que me permite ser eficiente con mi tiempo y enfocarme en diseñar. Pienso en mis proyectos todo el tiempo... Me puedo inspirar en cualquier momento. Llevo un cuaderno de bocetos conmigo para poder documentar ráfagas repentinas de creatividad en cualquier momento. Como viajo mucho por trabajo, uso los tiempos de inactividad de los vuelos para mantenerme actualizada sobre lo que sucede en el mundo del arte, la cultura, la tecnología y los negocios globales mediante la lectura de muchos artículos.
¿Cómo diferencia su compañía de la competencia? ¿Hay algo que pueda denominarse la "marca" de Kelly Wearstler?
Siempre he creído en continuar siendo auténtica. Mi meta es ser coherente con mi filosofía principal de crear belleza mediante diseños esmerados. Me considero a mí misma una diseñadora de interiores, una ampliadora de ideas, una creadora de experiencias. Mi estudio crea ambientes para que las personas puedan ampliar sus experiencias en ellos y añadir un elemento de aventura a sus vidas.
Mi proceso de diseño es un proceso emocional para mí. Saber escuchar es el aspecto más importante de mi trabajo. Comienzo cada proyecto reuniéndome con el cliente y comprendiendo cuáles son sus metas, la visión, el programa y la historia en particular que quieren expresar. Cada proyecto debe tener su identidad propia. Mis clientes son mi mayor fuente de inspiración, encontrar la harmonía entre las diferentes voces e influencias es lo que hace que el diseño sea interesante, lo que lo impulsa hacia adelante. Es un camino de curiosidad y experimentación que se hace en colaboración. Siempre está evolucionando.